Gracias a la interacción que se produce entre la Luna y la Tierra, la Luna se asocia a la fertilidad y al parto. Hay más nacimientos cuando hay Luna llena que en cualquier otro momento del ciclo lunar y, durante miles de años, se ha convocado a las diosas lunares, como la diosa Diana para aumentar la fertilidad y ayudar a la concepción
La Luna, ese gran misterio. Se la conoce con muchos nombres y la veneran numerosas culturas de todo el mundo, tanto antiguas como modernas. Nuestra Gran Luna inspira asombro cuando contemplamos su plenitud en el cielo e ilumina con su luz plateada las sombras de la noche. Hombres y mujeres están íntimamente ligados a sus rostros cambiantes: de creciente a llena, de menguante a nueva, mientras avanza por su ciclo lunar. Cuando atrae y desplaza las aguas de la Tierra provocando las mareas altas y bajas, también influye en el agua de nuestros cuerpos, afectando a nuestro estado de ánimo, patrón de sueño, salud y a los ciclos "lunares" de las mujeres. Existe una gran documentación sobre los poderosos efectos que tiene la Luna llena sobre la estabilidad mental y emocional.
Como la Luna está dentro del campo gravitatorio de la Tierra, interactúa con nosotros y su órbita elíptica afecta al acomportamiento del clima de todo el mundo. Lluvias. tormentas tropicales, huracanes y terremotos se han relacionado con la influencia y la actividad lunares. Está íntimamente vinculada a nuestro mundo y nos afecta profundamente al igual que el Planeta que habitamos.
La Luna, magia y misterio, y sabiduría !... desde el comienzo de los tiempos. Un tema fascinante Luz, acompañado de imágenes preciosas !!!! felicidades !
ResponderEliminarMucho se ha investigado ya .. mucho más ignoramos todavía, la señora Luna tiene sus secretos. Inspiradora sin dudas, testigo de enamorados, de soñadores, de locos ..
Con tu permiso, quisiera dejar unos versos .. a muchos ha desvelado. Ella tan simple y por eso, casi inasible ..
LA LUNA
Cuenta la historia que en aquel pasado
Tiempo en que sucedieron tantas cosas
Reales, imaginarias y dudosas,
Un hombre concibió el desmesurado
Proyecto de cifrar el universo
En un libro y con ímpetu infinito
Erigió el alto y arduo manuscrito
Y limó y declamó el último verso.
Gracias iba a rendir a la fortuna
Cuando al alzar los ojos vio un bruñido
Disco en el aire y comprendió, aturdido,
Que se había olvidado de la luna.
La historia que he narrado aunque fingida,
Bien puede figurar el maleficio
De cuantos ejercemos el oficio
De cambiar en palabras nuestra vida.
Siempre se pierde lo esencial. Es una
Ley de toda palabra sobre el numen.
No la sabrá eludir este resumen
De mi largo comercio con la luna.
No sé dónde la vi por vez primera,
Si en el cielo anterior de la doctrina
Del griego o en la tarde que declina
Sobre el patio del pozo y de la higuera.
Según se sabe, esta mudable vida
Puede, entre tantas cosas, ser muy bella
Y hubo así alguna tarde en que con ella
Te miramos, oh luna compartida.
Más que las lunas de las noches puedo
Recordar las del verso: la hechizada
Dragon moon que da horror a la halada
Y la luna sangrienta de Quevedo.
De otra luna de sangre y de escarlata
Habló Juan en su libro de feroces
Prodigios y de júbilos atroces;
Otras más claras lunas hay de plata.
Pitágoras con sangre (narra una
Tradición) escribía en un espejo
Y los hombres leían el reflejo
En aquel otro espejo que es la luna.
De hierro hay una selva donde mora
El alto lobo cuya extraña suerte
Es derribar la luna y darle muerte
Cuando enrojezca el mar la última aurora.
(Esto el Norte profético lo sabe
Y tan bien que ese día los abiertos
Mares del mundo infestará la nave
Que se hace con las uñas de los muertos.)
Cuando, en Ginebra o Zürich, la fortuna
Quiso que yo también fuera poeta,
Me impuse. como todos, la secreta
Obligación de definir la luna.
Con una suerte de estudiosa pena
Agotaba modestas variaciones,
Bajo el vivo temor de que Lugones
Ya hubiera usado el ámbar o la arena,
De lejano marfil, de humo, de fría
Nieve fueron las lunas que alumbraron
Versos que ciertamente no lograron
El arduo honor de la tipografía.
Pensaba que el poeta es aquel hombre
Que, como el rojo Adán del Paraíso,
Impone a cada cosa su preciso
Y verdadero y no sabido nombre,
Ariosto me enseñó que en la dudosa
Luna moran los sueños, lo inasible,
El tiempo que se pierde, lo posible
O lo imposible, que es la misma cosa.
De la Diana triforme Apolodoro
Me dejo divisar la sombra mágica;
Hugo me dio una hoz que era de oro,
Y un irlandés, su negra luna trágica.
Y, mientras yo sondeaba aquella mina
De las lunas de la mitología,
Ahí estaba, a la vuelta de la esquina,
La luna celestial de cada día
Sé que entre todas las palabras, una
Hay para recordarla o figurarla.
El secreto, a mi ver, está en usarla
Con humildad. Es la palabra luna.
Ya no me atrevo a macular su pura
Aparición con una imagen vana;
La veo indescifrable y cotidiana
Y más allá de mi literatura.
Sé que la luna o la palabra luna
Es una letra que fue creada para
La compleja escritura de esa rara
Cosa que somos, numerosa y una.
Es uno de los símbolos que al hombre
Da el hado o el azar para que un día
De exaltación gloriosa o de agonía
Pueda escribir su verdadero nombre
Jorge Luis Borges
gracias, un abrazo amiga !
Gracias por dejar aquí esos versos maravillosos de Jorge Luis Borges, tan fascinante en los diferentes puntos de vista que plantea y donde la Señora Luna es la Dama Excelsa y protagonista indiscutible, de todas y cada una de sus inquietantes historias...
ResponderEliminarEs un lujo contar con tu opinión, te lo agradezco, al igual que el poema!
Un abrazo enorme!
Hermoso tema sobre la luna, su influencia, su magia y su misterio. La Luna es el planeta más cercano a la Tierra ejerce una poderosa influencia sobre la naturaleza y nuestra psique, conviene tener presente los distintos estados de la Luna en el cielo para adaptarnos a sus posibilidades y obtener de su influjo los mayores beneficios.
ResponderEliminarEn las noches de luna llena nos sentimos embelesados por su presencia, nos envuelve con su magia y su misterio, felicidades por este apasionante tema, hermosas las fotografías que le acompañan.
Besos y un entrañable abrazo!!
Cuántas y variadas sensaciones nos transmite la Luna a todos, verdad, Fiam? Esa magia nocturna que en las noches de máximo esplendor de plenilunio nos embruja y transforma y hace que las sombras adquieran un matiz muy diferente... Doña Luna es mucha Luna!!!
ResponderEliminarGracias por tu visita y exquisito comentario!
Un abrazo enorme!
Tienes un espacio muy bonito e interesante Luz
ResponderEliminarMe pregunto el por qué la luna causa esos efectos sobre las mareas, las plantas,en el comportamiento de los animales , de las personas, por qué se producen más nacimientos... en fín es todo un misterio ,será que realmente la luna es mágica.
Un abrazo.
Hola Julia!
ResponderEliminarAntes de nada agradezco tu comentario en el que tienes elogios para éste, mi blog. No hace falta que te diga que estás invitada a visitarlo y opinar siempre que te apetezca e interese, para mí es un honor contar con tu presencia virtual. Aunque hace tiempo que nos encontramos en otro espacio, no hemos tenido ocasión de conocernos a pesar de tener amig@s en común.
Realmente es muy interesante todo lo que se refiere a la Luna. La fuerza con que mueve las mareas y afecta a nivel psíquico y físico a las personas, entre otras cosas, es sin duda un gran enigma que la hace mágica.
Un abrazo!